Celebra Coneculta segundo aniversario del Paralibros

 •    Se contó con la participación del escritor Eraclio Zepeda, quien apadrinó el eventoEl escritor chiapaneco Eraclio Zepeda apadrinó el segundo aniversario del ParalibrosCS09, ubicado en el centro de la capital chiapaneca, en donde reconoció el trabajo loable del mediador Óscar Figueroa y del Consejo Estatal para las Culturas y las Artes (Coneculta-Chiapas).

 Al hacer uso de la palabra, mencionó que con el trabajo que día a día realiza el paralibro, se fomenta el gusto por el libro y la lectura entre las y los tuxtlecos, sin olvidar a sus visitantes.“Se lleva a cabo una gran labor, ya que es un espacio público y una excelente oportunidad para que la gente pueda acercarse de una manera obligada en los libros y quien pasa tiene acceso a ellos”, comentó.Con el peculiar humor que le caracteriza, “Laco” Zepeda narró importante hechos de la historia de Chiapas que incluyó el proceso de incorporación del estado a la República Mexicana, con sus tradiciones indígenas y su cultura ancestral.En dicho evento que duró más de dos horas, el escritor leyó ocho cuentos, la remembranza de cuatro novelas, su vida literaria entre otros, haciendo una charla interesante hacía el público.De libros como “Benzulul” y “Asalto nocturno”, narró los principales conflictos de la época y rescató la importancia de la influencia de la cultura africana en el estado, como por ejemplo, en la mundialmente conocida marimba.Cabe mencionar que los Paralibros, pertenecientes al Programa Nacional Salas de Lectura del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), son estructuras semejantes a una parada de autobús que se instalan en parques, plazas y otros espacios públicos.Al igual que las Salas de Lectura, los Paralibros ofrecen una colección básica constituida por 365 libros, al menos uno distinto para cada día del año, donde se ofrece la asesoría de un mediador y préstamo a domicilio de los libros en horarios y días fijos que los vecinos y transeúntes conocen.Los Paralibros surgieron por iniciativa de la Dirección General de Publicaciones (DGP) del Conaculta, a través de su Dirección General Adjunta de Fomento de la Lectura y el Libro, como un fruto más de la trayectoria del Programa Nacional Salas de Lectura (PNSL) en la formación de mediadores de lectura y el establecimiento de espacios de lectura en lugares no convencionales o de difícil acceso.